En medio del ciclo electoral de 2024, el tema de la inmigración con respecto a la candidata Kamala Harris y el Partido Demócrata han sido una vulnerabilidad particular. Al revisar su historial, es bastante difícil describirla en los cortos bytes de sonido comunes del ciclo de noticias electorales. Su postura se ha visto eclipsada en gran medida por las políticas de su predecesor, el presidente Biden, centradas en la seguridad fronteriza y la restricción de las solicitudes de asilo. Dada su participación en estas políticas, su historial es mixto, por decir lo menos. Bajo las políticas de Biden, ella ha tratado de alentar la inversión de corporaciones multinacionales estadounidenses en América Latina, particularmente en Centroamérica, con el fin de frenar la inmigración a Estados Unidos.
Dejando a un lado su participación en la adopción de políticas establecidas por la Administración Biden, su historial se entiende mejor en el contexto de su experiencia como fiscal. Como fiscal de distrito en San Francisco, apoyó una política para entregar a los menores migrantes sospechosos de delitos graves a las autoridades de inmigración, admitiendo en 2019 que la «política podría haberse aplicado de manera más justa». De la misma manera, en 2014, Harris recaudó millones de dólares para asegurarse de que los menores no acompañados que acudían solos a los tribunales de inmigración tuvieran abogados.
Durante su campaña presidencial de 2019, su postura fue marcadamente más izquierdista, con planes que incluían un camino a la ciudadanía para los beneficiarios de DACA. También fue una de varios demócratas que reintrodujeron la Ley REUNITE para «acelerar la reunificación de las familias inmigrantes separadas y promover alternativas humanas para las familias inmigrantes que buscan asilo». Durante este tiempo, criticó el Título 42, que rechazaba a los migrantes sin ofrecer la oportunidad de pedir protección en Estados Unidos, y una vez expresó su apoyo a la despenalización del cruce fronterizo y mencionó que el ICE podría necesitar una revisión.
Esta postura ha cambiado desde entonces. En su actual candidatura a la presidencia, se ha movido hacia la derecha en este tema, haciendo hincapié en la seguridad fronteriza y diciendo que haría que el asilo fuera más difícil de obtener. Aunque algunos grupos de derechos de los inmigrantes tienen la esperanza de que ella considere el problema con humanidad, aún queda mucho por verse.
¡mucho cuidado!
Cuídese de los notarios, consultores en inmigración o cualquier persona no calificada y preparada en estos temas. Siempre busque la asesoría y los servicios de un abogado de inmigración para sus procesos y trámites migratorios.